La reunión, celebrada con una comida en El Gran Escenario, el restaurante del Estadio Metropolitano, ha sido presidida por el propio Gil Marín, acompañado del responsable de socios y ticketing, David González y del director del área social, Fernando Fariza, con la presencia de algunos accionistas. Por parte de la afición, han estado presentes una decena de colectivos, la Unión Internacional de Peñas, que representa a más de 200 peñas, la grada de animación y otras peñas a nivel individual, convocadas a este encuentro por el propio club.
La conclusión más importante de esa reunión, que ha durado tres horas y media, es que se ha alcanzado un acuerdo para la creación de una Comisión consultiva que de voz a la afición en su relación con el Club. Sería una comisión cuya composición está aún por definir pero que incluirá representación de todos los colectivos relacionados con los aficionados. Su papel será consultivo, es decir, tendrá voz para influir en las decisiones que tome el club en las materias que afectan a la afición y trasladará sus inquietudes, aunque los dirigentes del Atleti se reservan la decisión última.
En particular se han puesto como ejemplo la polémica por el cambio de escudo. Según fuentes presentes en la reunión, consultadas por Más Atlético, Gil ha admitido que pudo equivocarse con ese cambio y ha abierto la puerta a que, si esa nueva comisión así lo decide, se pueda tratar la realización de un referéndum sobre el regreso del antiguo; al menos esa posibilidad no se ha descartado.
También se ha planteado la posibilidad de proponer y abordar desde ese órgano consultivo un cambio en el concepto y características del Paseo de Leyendas, como podría ser el cambio de denominación a Paseo Centenario. Lo importante, según las fuentes consultadas, es que el máximo dirigente del Atleti se ha mostrado en esta reunión muy abierto a escuchar a los aficionados y a hacerles partícipes de la toma de decisiones. Miembros de las peñas presentes consultados por Más Atlético han calificado de 'histórico' este encuentro, por ser la primera vez que desde el club se tiene esta cercanía con los aficionados.
El otro asunto que ha generado fricción con la afición es el de la camiseta. Sobre la de este año no hay nada que hacer, ya está diseñada, anunciada y en parte fabricada. Sin embargo se introduce una novedad importante para el futuro porque la nueva comisión también participará dando su opinión sobre los futuros diseños de la equipación. Dicha comisión intervendría en el proceso de negociación de las camisetas que presente Nike junto a los responsables de marketing y retail. En este sentido, Gil Marín se ha desmarcado de la elección del diseño, un asunto que deja en manos del departamento de marketing, aunque ha confesado que, como a la mayoría de aficionados, el diseño elegido tampoco le entusiasma.
Otra cosa es la camiseta para la siguiente temporada, la equipación de la campaña 23/24. Nike ya trabaja en el diseño (que se desarrolla con 18 meses de antelación) y Gil ha mostrado a los asistentes un primer boceto de cómo será esa camiseta. A juicio de los presentes tendrá los elementos necesarios para que guste a la mayoría de los aficionados.
Otro anuncio en relación con las camisetas es la intención de que en el futuro, cuando los contratos con Nike lo permitan, las camisetas puedan personalizarse, que el comprador pueda decidir, por ejemplo, que su camiseta de la primera equipación lleve el escudo antiguo.
De momento todo son promesas. En los próximos días el club mandará un comunicado a los socios anunciando la creación de esta Comisión con más datos sobre su composición y funciones. Según interpretan las fuentes consultadas, Gil Marín ha sido receptivo a las demandas de los aficionados y el mero hecho de que se haya producido esta reunión (antes, por cierto, de que se remita al club un documento refrendado por más de un centenar de peñas) supone un reconocimiento por parte del club de que hay un problema que sólo puede solucionarse con el diálogo.
El CEO del Atleti ha respondido a todas las opiniones con respeto y ha pedido a los presentes que haya paz social porque el crecimiento del club no se puede basar sólo en la mejora o creación de nuevas infraestructuras como el estadio o la proyectada ciudad deportiva. Ha llegado a afirmar que él no quiere participar de estas situaciones de conflicto porque no ayudan al club e incluso repercuten para mal en la propia plantilla.
