Desde que aterrizó en el Atlético, Rodrigo de Paul ha llevado una especie de doble vida. Mientras que no ha podido adaptarse al estilo de Simeone, en Argentina parecía sufrir una transformación que le convertía en uno de los mejores mediocentros del mundo. Su papel en la última Copa América, la cual terminó levantando la Albiceleste en Brasil, fue un ejemplo de qué nivel puede llegar a alcanzar el ex de Udinese, aunque nunca lo ha podido demostrar vestido de rojiblanco
Ahora, con la primera mitad de temporada horrible, se esperaba que De Paul demostrase su verdadero nivel bajo las órdenes de Scaloni, algo que siempre había conseguido pero que en esta ocasión no fue así. Su partido ante Arabia Saudí fue el mismo esperpento que podemos comprobar habitualmente en el Metropolitano. Esto se traduce en 0 asistencias, 0 goles y menos del 80% de precisión en sus pases.
No es que el resto de Argentina estuviese mejor, pero el caso de De Paul resulta más sorprendente porque con Argentina sí que demostraba el nivel que no demostraba con Simeone… hasta este martes, momento exacto donde se vio a un jugador con falta de ritmo y que regaló muchas posesiones al equipo árabe. Todo esto nos puede traer una pregunta que lo mismo más de uno debería empezar a hacerse: “ ¿Y si este es el verdadero nivel de Rodrigo de Paul”.
