jueves. 16.05.2024
Celtic 2-2 Atleti

Celtic Park se hizo grande ante un Atleti que se quedó a un paso de la victoria

El Atlético de Madrid sufrió en Celtic Park para remontar hasta en dos ocasiones los goles locales. Cuando más asediaba la portería de Hart para lograr la victoria, una inoportuna expulsión de De Paul dejó al equipo sin opciones.
La expulsión de De Paul cambió el partido / Foto: ATM
La expulsión de De Paul cambió el partido / Foto: ATM

Quizás muchos esperaban una reedición de la "batalla de Glasgow" del 74 pero en el 2023 Atlético de Madrid y Celtic ofrecieron una bonita batalla estrictamente futbolística en el que sólo el colegiado alemán, Félix Zwayer, quiso imitar al turco Babacan. Duro con los jugadores del Atleti, ligero con los del Celtic, su celosa expulsión de De Paul cuando el Atleti asediaba la puerta de Hart impidió que los visitantes culminaran el trabajo que estaban cociendo a fuego lento.

JAVI GALÁN SUFRE EN SU BANDA

Eso sí, el Atleti encendió los fogones bastante tarde. De inicio le salió rana el efecto camiseta del 74.  "El Celtic debe ver la camiseta del Atlético de Madrid como un toro a un capote rojo", pidió antes del encuentro Tommy Callaham, ex jugador de aquel Celtic que no olvida cómo ocho héroes le robaron la final de la Copa de Europa al que era uno de los mejores equipos del momento. Y así lo hicieron esta noche. Alentados por una grada enfervorecida, los celts quisieron vengar a aquel equipo que marcó una época multiplicando como un milagro la calidad e intensidad conocida hasta ahora de sus jugadores. 

Se encontraron enfrente con una defensa inédita que cojeaba por la izquierda. Simeone decidió que este día era el de dar la titularidad a Javi Galán y pronto comprobó su error. A los 3 minutos ya perdió la marca de Kyogo que se quedó cómodamente sólo ante Oblak para adelantar al Celtic en el marcador. Cuando el Atleti consiguió tranquilizarse, Rodrigo de Paul y Griezmann empezaron a brillar con combinaciones rápidas ante la presión del rival. A los quince minutos el francés ya había disparado al palo con poco ángulo y 7 minutos después De Paul filtraba a Molina un gran pase interior al que llegó antes que su marcador, que lo derribó cometiendo penalti. Griezmann lo disparó al palo pero el rebote le llegó a sus pies para poner el empate a 1.

Aunque el Atleti combinaba en ataque con cierto éxito, el Celtic aprovechaba la velocidad de sus extremos para dejar en evidencia a la defensa atlética. Sobre todo en la banda de Galán, que sufrió lo indecible con las acometidas de Maeda, una especie de reencarnación del pequeño pero matón Johnstone que volvió locos a los zagueros rojiblancos del 74 . Una combinación del japonés y Palma, de banda a banda, sirvió a este último para volver a adelantar en el marcador al Celtic sin tiempo a que el Atleti saboreara el empate.

Antes del descanso un fuera de juego de centímetros impidió que un cabezazo de Witsel a la red subiera al marcador. Antes, el colegiado alemán  ya había iniciado su particular homenaje a Babacan, el árbitro turco del 74, sacando amarillas a los jugadores atléticos casi por mirar. A Galán por empujar ligeramente el balón; a Nahuel por levantar las manos delante de un jugador que sacaba de banda; a De Paul por protestar sin muchos aspavientos unas manos en el área del Celtic, de la que se acordaría más tarde.

SIMEONE REVOLUCIONA LA ALINEACIÓN

En la segunda parte, Simeone quiso frenar el peligro que llegaba por la izquierda de modo que al descanso sustituyó a Galán y a Saúl, que habían estado bastante flojos. De Maeda se encargó entonces Riquelme, y Llorente se puso a correr por la banda derecha, pero no el Llorente de esta campaña; el que salió fue el Llorente de las grandes noches europeas. En el 53 agarró el balón en el centro del campo dejando atrás a sus defensores para meter un balón preciso al área donde Morata se lanzó de cabeza para rematar a puerta como si fuera su última misión en la vida. Un golazo que ponía nuevamente el empate en el marcador.

El Atleti se posicionó desde ese momento mucho mejor en el campo y Brendan Rodgers entendió que el partido iba a volcarse hacia su portería así que afianzó su defensa. Mediada la segunda parte el Atleti consiguió lo que no había conseguido hasta entonces, tomar el control completo de un partido ante un rival al que se le fue la energía según se agotaba la de la grada local, que enmudeció ante el empuje de los desplazados rojiblancos.

LA EXPULSIÓN DE DE PAUL FRENA AL ATLETI

Simeone cambió a Morata por Correa para que el argentino caracoleara en los escuetos espacios que iba a dejar el Celtic en su área. Probó al portero en una buena ocasión pero no tuvo muchas más oportunidades. El imitador de Babacan quiso terminar su homenaje expulsando a De Paul con una segunda amarilla por una falta en la que arriesgó pero en la que no hubo peligro ni violencia.

Era el minuto 81 y la superioridad dio alas a los celts. El Atleti dio por bueno un empate que hasta ese momento iba camino de convertirse en victoria. El punto sabe algo amargo pero el Atleti se sitúa segundo en su grupo y sigue dependiendo de sí mismo para situarse primero. La batalla por ese puesto arrancará en el Metropolitano el 7 de noviembre contra el mismo Celtic. Ahora sí, esperemos que el resultado entonces sea una victoria como la de la vuelta del partido del 74.

Celtic Park se hizo grande ante un Atleti que se quedó a un paso de la victoria