viernes. 26.04.2024
Alineación del Atleti frente al Oporto / Foto: ATM
Alineación del Atleti frente al Oporto / Foto: ATM

OBLAK: Salvador

En la primera parte apenas tuvo que intervenir en una ocasión pero en la segunda mitad sacó al mejor Oblak a relucir para salvar al equipo de una derrota. Hizo tres grandes paradas cuando más dominaba el Oporto y el Atleti se hundía. Sus intervenciones mantuvieron vivo al equipo para el arreón final. A punto estuvo de parar el penalti.

NAHUEL MOLINA: Nervioso

No está teniendo suerte en el Metropolitano Nahuel Molina. Si los nervios le jugaron una mala pasada en su debut en el coliseo rojiblanco, donde acabó expulsado, esta noche la inseguridad le llevó a perder en defensa varios balones en situaciones comprometidas. Sí se entendió bien en ataque con Llorente, pero los errores continuados recomendaron a Simeone mandarlo a la caseta al descanso.

REINILDO MANDAVA: El cerrojo

La banda izquierda del mozambiqueño es una tortura para los rivales. Su zona es un erial para los contrarios. Su capacidad para amargar a su marca es inversamente proporcional a la tranquilidad que proporciona a la grada. Tras la salida de Hermoso acabó jugando de extremo. Y ni tan mal.

GIMÉNEZ: Impreciso

Comenzó siendo contundente en defensa pero resultó muy impreciso ante la presión y al intentar sacar el balón jugado. Acabó perdiendo balones peligrosos en su área. Tiene que mejorar ahora que sobrevive a las lesiones.

WITSEL: Imperial

La mejor noticia del partido vuelve a ser el fichaje belga. Siempre bien colocado y dando sensación de seguridad es la referencia en la salida del balón a la que acuden siempre sus compañeros. Cuando tiene que cortar una llegada también está ahí para hacerlo sin despeinar su melena afro. Para remate, salvó una contra en la prórroga y suya fue la prolongación del lanzamiento de corner de Lemar que acabó en el gol de Griezmann. Fundamental.

LLORENTE: Versátil

Gran esfuerzo de Marcos Llorente, que aportó mucho trabajo y combinó bien con Molina en ataque. Eso en la primera parte porque con la salida de De Paul retrasó un poco su posición y tuvo más presencia en labores defensivas.

CARRASCO: Desdibujado

No acaba de coger forma Yannick Carrasco. Lo intentó en varias ocasiones en la primera parte pero se nota que aún no está fino. Fue perdiendo presencia y Simeone lo cambó al descanso.

KOKE: Irregular

Tampoco acaba de estar fino Koke, que en la primera parte no tuvo protagonismo y en la segunda falló varios pases e irritó a la grada con un disparo flojo a portería. No se adueñó del centro del campo en ningún momento y estuvo a punto de ser expulsado cuando ya tenía una tarjeta amarilla. Aún así es un seguro para sus compañeros porque siempre se ofrece para dar una solución a la presión. Aún estando gris marcó un golazo desde fuera del área que fue anulado por fuera de juego de De Paul.

SAÚL: Despliegue

Se recorrió todo el campo. Acompañó a Koke en el centro y se le vio tanto defendiendo como atacando el área para aprovechar su buena llegada. Su pareja con Koke no generó suficiente creatividad pero el ilicitano va ganando confianza. En la segunda parte ocupó la posición de Carrasco en el extremo y ahí pasó desapercibido hasta que fue sustituido. Progresa.

JOAO FÉLIX: Desequilibrante

Fue el mejor, por momentos la única luz del partido. Cada vez que tocaba el balón había peligro y desborde. Provocó innumerables faltas y tarjetas, aunque no estuvo del todo preciso ante la portería. El Metropolitano fue un clamor cuando Simeone decidió cambiarlo por no bajar a defender tras una jugada en solitario. Los pitos fueron generalizados. El técnico lo vio cansado y dio entrada a Correa.

MORATA: Sin protagonismo

Comenzó con mucho ímpetu pero no salió ganador de la pelea con los centrales. Fue de más a menos, como el equipo hasta la expulsión del jugador del Oporto. Dejaron de encontrarle y perdió protagonismo. No tuvo oportunidades.

LEMAR: Nulo

Simeone le dio entrada para tener más creatividad en el centro del campo, desplazando a Saúl. Se ofreció pero, literalmente, no dio ni una. Exaspera la irregularidad del francés que mezcla grandes partidos con otros desastrosos. Todo lo que tocó se perdió.

CORREA: Chispa

Simeone buscó en Correa la chispa que se estaba acabando a Joao pero en una posición más avanzada. Se entendió bien con Griezmann haciendo paredes que rompían la defensa del Oporto. Aprovechando los minutos.

DE PAUL: Fallón

Saltó al campo con la energía para responder a Simeone, quien le pidió que demostrara más en una reciente entrevista. Pero se le acabó pronto. No estuvo preciso y se fue diluyendo con el paso de los minutos. Eso sí, dio la cara hasta el final.

HERMOSO: Furia y error

Salió para reforzar la defensa pero él quiso ser protagonista. Volvió a marcar uno de esos goles decisivos en los que se está especializando. Sacó fuera de sí toda la rabia acumulada tras los incidentes con el fondo sur, que esta vez ignoró su pasado para rendirse a la casta de un jugador que se agarraba el escudo. Tan exultante estaba que una jugada después cometió la imprudencia de golpear con la mano el balón y provocar el penalti del empate. Uno di noi.

GRIEZMANN: El más decisivo por minuto

Ya no es ese jugador que deambulaba por el campo la pasada temporada. Buscó el balón cuando el Atleti más perdido estaba y buscó el peligro junto con Correa. Como en sus mejores tiempos, vuelve a estar donde se le necesita, vuelve a ser ese jugador decisivo que ya forma parte de la historia del Atleti. Su gol en el último segundo lo demuestra. No es el Principito. Es el rey.

ASÍ JUGARON...