miércoles. 08.05.2024
Vinicius se reúne con Florentino Pérez / Captura RMTV
Vinicius se reúne con Florentino Pérez / Captura RMTV

Sorprendente e inédita decisión del Comité de Competición de la RFEF sobre los hechos que tuvieron lugar en Mestalla y que acabaron con la expulsión de Vinicius Júnior por agresión sobre Hugo Duro en el minuto 95. La tarjeta roja decidida por el árbitro Ricardo de Burgos Bengoetxea, a instancias del VAR, que le llamó a revisar lo ocurrido, ha quedado sin efecto. No porque no haya ocurrido, no porque hubiera un error manifiesto del colegiado, sino porque no le mostraron una imagen completa de unos hechos que, en cualquier caso, no hubieran variado la decisión del árbitro sobre Vinicius.

EL COMITÉ CALCA LOS ARGUMENTOS DEL REAL MADRID

La argumentación del Comité no trata de disimular nada. Se limita a calcar todos y cada uno de los argumentos de la reclamación del Real Madrid:

Este Comité considera acreditado que la apreciación del colegiado estuvo determinada por la omisión de la totalidad del lance sucedido, lo que vició a radice la decisión arbitral. En efecto, el hecho de que le fuese hurtada una parte determinante de los hechos le abocó a adoptar una decisión arbitraria. Y ello porque le fue imposible valorar de modo adecuado lo que ocurrió, pues en el procedimiento necesario para la adopción de tal decisión se habría producido la omisión de un trámite indispensable para que la misma hubiera podido ser legítima y legalmente adoptada. (Comité de Competición, 23/05/23)

El Comité interpreta que el colegiado no pudo valorar los hechos de modo adecuado porque se le hurtó una parte de lo ocurrido. Esa parte omitida es el agarrón en el cuello de Hugo Duro al jugador del Real Madrid previo a la agresión. ¿De haber visto el colegiado esa acción no habría mostrado tarjeta roja a Vinicius? ¿Acaso se sugiere en la decisión que un agarrón previo justifica que quede impune una acción antideportiva como fue el manotazo de Vinicius? Ver la jugada completa sólo habría ayudado al árbitro a considerar una tarjeta roja para Hugo Duro pero en ningún caso para no mostrársela a Vinicius.

El caso es que el Comité procede a hacer lo que siempre dice que no hace, que es rearbitrar un partido sin que haya error manifiesto del colegiado que pudo observar unos hechos indubitados en directo y en la revisión del VAR. Una decisión inaudita e incomprensible que solo se entiende cuando se leen las quejas con las que el Real Madrid lleva presionando desde la misma noche del domingo.

PRESIÓN DEL REAL MADRID SOBRE LA FEDERACIÓN

En el comunicado que el club emitió el lunes se hace referencia a los insultos racistas que sufre el jugador en los campos de España y acusa a la Federación de inacción, con mención específica a su presidente, Luis Rubiales. Lo sorprendente es que a continuación mezcla ese asunto con las actuaciones del VAR y del comité arbitral, al que acusa contra toda evidencia de actuar contra el Real Madrid. Y cita específicamente la expulsión de Vinicius, que nada tuvo que ver con los hechos racistas anteriores.

Con su pasividad se ha contribuido al desamparo y a la indefensión de nuestro jugador Vinicius. Los árbitros, lejos de actuar con firmeza y aplicar los protocolos reglamentarios, han elegido en la mayoría de los casos inhibirse y evitar tomar las decisiones que les correspondían. Ayer mismo, el colegiado y los responsables del VAR eludieron sus responsabilidades y tomaron decisiones injustas basadas en imágenes incompletas, que no se vieron en su totalidad, que fueron sesgadas y que provocaron la expulsión directa de nuestro jugador Vinicius Júnior.  
Lamentablemente, lo ocurrido ayer y la gestión que se hizo por parte de los árbitros y del VAR no lo percibimos como algo aislado, sino como algo que se viene repitiendo en muchos de nuestros partidos. Nunca se puede hacer responsable del delito a la víctima que lo sufre. ((Comunicado del Real Madrid, 22/05/23)

Florentino Pérez no se quedó ahí. Este martes ante las autoridades políticas madrileñas en la celebración de la Euroliga del equipo madridista de baloncesto, afirmó lo siguiente:

Hay que cambiar la estructura arbitral de nuestro fútbol. Se encuentra con una estructura tecnológica como es el VAR, que es muy buena, pero cuyo reiterado mal uso, como el pasado domingo, se ha convertido en el principal problema. Un problema, como pasa en el caso de Vinicius, que convierte a la víctima en culpable. Esto lo hemos sufrido a lo largo de toda la competición. La pasividad no cabe ante estos hechos. La imagen de nuestro fútbol está seriamente dañada. (Florentino Pérez, 23/05/23)

Horas después de este comunicado, la RFEF tomaba la primera decisión para apaciguar al mandatario blanco. Seis árbitros VAR fueron despedidos empezando por Iglesias Villanueva, el responsable de llamar a De Burgos Bengoetxea para que viera la agresión de Vinicius merecedora de expulsión pero que no mostró la secuencia entera. A final del día llegaba el remate final con la absolución completa de Vinicius por parte del Comité disciplinario, con lo que su agresión queda impune. El jugador ya es libre de disputar los partidos finales del campeonato de Liga en los que el Real Madrid pugna por la segunda posición con el Atlético de Madrid.

SANCIÓN AL VALENCIA

El Comité adopta también una dura medida contra el Valencia, en este caso por los graves insultos recibidos por el jugador. La Federación acuerda el cierre parcial de la grada "Kempes" durante los cinco próximos partidos, así como una multa de 45.000 euros. El Comité considera probados una serie de hechos, algunos de los cuales ha sido muy discutido.

En primer lugar considera que a la llegada del autobús del Real Madrid, "cientos de seguidores que se apostaban en los alrededores coreaban el cántico: “Eres un mono...Vinicius eres un mono...eres un mono, Vinicius eres un mono”. También considera probados los hechos ocurridos en el terreno de juego cuando el jugador del Real recibió diversos insultos racistas procedentes de individuos de la grada.

El argumento más polémico es el que hace referencia a lo sucedido tras la expulsión de jugador. Según el Comité "tras la expulsión en el minuto 90, se produce un cántico generalizado por toda la grada de “Mono, mono” que transiciona a “Tonto, tonto”. Se trata de una apreciación ampliamente discutida por quienes presenciaron el encuentro en directo. De hecho, Carlo Ancelotti ha acabado por rectificar este martes su afirmación en ese sentido tras el partido.

El técnico italiano acusó a toda la grada de Mestalla de corear el "mono, mono", pese a que se le indicó desde la sala de prensa que lo que coreó el estadio fue "tonto, tonto". Este martes, Ancelotti matizaba sus palabras y redujo esos gritos a "un grupo", para a continuación cargar "dejando aparte el racismo", contra la costumbre de insultar en los estadios españoles. Pues bien, el Comité ha ido aún más lejos que el entrenador blanco. 

El Real Madrid somete a la Federación y logra que le retiren la roja a Vinicius